Una mañana a pleno sol y con la temperatura que va subiendo por hora, le dan el marco previo al lanzamiento del 34º Rally Dakar. Mar del Plata, como lo fue en su momento París, Barcelona, Granada, Lisboa y la propia Dakar, capital de Senegal, es la décima ciudad en ser anfitriona del lanzamiento de la competencia. Las inmediaciones de la rampa son un hormiguero de gente trabajando, colocando las últimas vallas, rodeando con carteles publicitarios la zona y encausando el paso de quienes tienen que ver con la carrera y alejar a curiosos y proveedores de negocios de la zona, que hoy tienen más dificultades que nunca para llegar a sus destinos. El último día del año tiene de todo menos tranquilidad para el mundo Dakar. Los equipos de transmisión radial y televisiva ya comienzan a apostarse alrededor de la rampa y el público que disfruta de la playa y el mar, bien planchado hoy por una suave brisa, se mueve lentamente porque sabe que todo comenzará después de las 15 y hay tiempo para la playa, un buen almuerzo y después... los autos.
A 30 cuadras de la rampa está el Village Dakar, en la base aeronaval de Mar del Plata donde están los autos, donde algunos todavía están cumpliendo con la verificación técnica y administrativa que no hicieron durante jueves y viernes y de la cual saldrá la lista definitiva para la partida. Otros aprovechan para sacarse fotos, buscar algún recuerdo de los patrocinadores de la carrera o comprarlo en las tiendas oficiales del Dakar.
El espectáculo de la partida estará amenizado por un conocido de los cordobeses, el piloto Jorge Malatini, un especialista en acrobacia aérea y que ya estuvo presente en el Cabalèn en ocasión de la carrera de Top Race. Con su avión biplano que alcanza los 380 km/h, espera hacer las delicias del público en pasadas rasantes, tirabuzones y otras de sus especialidades en el aire. Malatini detenta 27.600 horas de vuelo y ofrecerá su espectáculo como parte de lo que entregarà el Dakar a partir de las 15. Mucho antes, desde las 13, comenzarán a desfilar por la rampa los anunciantes y los que apoyan la carrera. La fiesta está servida en Mar del Plata y hay muchos comensales dispuestos a disfrutarla.
FUENTE