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La diabetes tipo 1 es una condición en la cual el organismo es incapaz de producir insulina. Sin insulina, la capacidad del cuerpo para utilizar la glucosa como fuente de energía se ve afectada.
Sin
embargo, esta condición no implica que
los deportistas con diabetes deban abandonar sus sueños de tener una carrera
deportiva exitosa. El nadador estadounidense
Gary Hall Jr. que en el año 1999 fue diagnosticado con diabetes tipo 1, participó
en los juegos olímpicos de 1996, 2000 y
2004, ganando en total 10 medallas olímpicas (5 de oro, 3 de plata y 2 de
bronce), además ha ganado medallas en dos Campeonatos mundiales de Natación,
dos campeonatos Pan-Pacíficos de Natación y dos Juegos Panamericanos.
Otro medallista olímpico, el remero británico Steve
Redgrave obtuvo en Sidney 2000 su quinta medalla de oro olímpica consecutiva,
también ganó nueve medallas de oro en los Campeonatos del Mundo en Remo, en
1997 fue diagnosticado con diabetes.
También el jugador de la NBA, Adam Morrison tiene
diabetes tipo 1, diagnosticado cuando estaba en octavo grado, sin embargo su
enfermedad no fue ningún obstáculo en su camino por convertirse en una estrella
en el mundo del básquet, ha sido comparado con el legendario Larry Bird. Y el alpinista español, Joju
Feijoo, quien fue el primer diabético en coronar el Everest y en el 2010
reicibió la Insignia Olímpica por parte del Comité Olímpico Español en
reconocimiento a los méritos logrados con su condición de deportista diabético.
Ellos son sólo algunos de los atletas de élite con
diabetes tipo 1 que obtuvieron los mayores logros en su carrera deportiva.
La
presente publicación aborda los temas fundamentales de nutrición deportiva para
las personas con diabetes tipo 1. Sin embargo las necesidades de cada persona
con diabetes son individuales y la presente información no debe sustituir el
consejo de su especialista en diabetes.
Efectos de la Diabetes Tipo 1 en el Metabolismo
La insulina es una hormona producida en el páncreas. Tiene una serie de funciones importantes en el cuerpo, incluyendo un efecto regulador sobre el metabolismo de los hidratos de carbono. La insulina estimula la glucosa para ser absorbida por las células del cuerpo y ser utilizada como combustible. Inhibe la glucogenolisis (producción de glucosa a partir de la degradación del glucógeno) en el hígado y estimula la síntesis de glucógeno muscular después del ejercicio. En ausencia de diabetes, la insulina se libera de acuerdo con las necesidades del cuerpo y la concentración de glucosa en la sangre (glucemia) se mantiene dentro de un rango estrecho. Las personas con diabetes tipo 1 no producen insulina, por lo tanto el organismo no puede utilizar correctamente la glucosa como fuente de energía y empieza a utilizar la grasa y las proteínas como combustible. Esto hace que los niveles de glucosa en sangre a subir en exceso y subproductos del metabolismo de las grasas (cetonas) se acumulan excesivamente en la sangre produciendo toxicidad. Si no se trata, esto puede ser fatal.
Tratamiento de la Diabetes Tipo 1
La diabetes tipo 1 requiere inyecciones regulares de insulina. La cantidad y el momento de la administración de los diferentes tipos de insulina debe ir en relación a factores como la ingesta de alimentos, el metabolismo del individuo y el nivel de actividad. Los niveles de glucosa en sangre deben ser controlados regularmente para asegurar la cantidad adecuada de insulina que se debe administrar. El mal uso de la insulina se traducirá en niveles anormales de glucosa en la sangre, hipoglucemia o hiperglucemia:
Efectos de la Diabetes Tipo 1 en el Metabolismo
La insulina es una hormona producida en el páncreas. Tiene una serie de funciones importantes en el cuerpo, incluyendo un efecto regulador sobre el metabolismo de los hidratos de carbono. La insulina estimula la glucosa para ser absorbida por las células del cuerpo y ser utilizada como combustible. Inhibe la glucogenolisis (producción de glucosa a partir de la degradación del glucógeno) en el hígado y estimula la síntesis de glucógeno muscular después del ejercicio. En ausencia de diabetes, la insulina se libera de acuerdo con las necesidades del cuerpo y la concentración de glucosa en la sangre (glucemia) se mantiene dentro de un rango estrecho. Las personas con diabetes tipo 1 no producen insulina, por lo tanto el organismo no puede utilizar correctamente la glucosa como fuente de energía y empieza a utilizar la grasa y las proteínas como combustible. Esto hace que los niveles de glucosa en sangre a subir en exceso y subproductos del metabolismo de las grasas (cetonas) se acumulan excesivamente en la sangre produciendo toxicidad. Si no se trata, esto puede ser fatal.
Tratamiento de la Diabetes Tipo 1
La diabetes tipo 1 requiere inyecciones regulares de insulina. La cantidad y el momento de la administración de los diferentes tipos de insulina debe ir en relación a factores como la ingesta de alimentos, el metabolismo del individuo y el nivel de actividad. Los niveles de glucosa en sangre deben ser controlados regularmente para asegurar la cantidad adecuada de insulina que se debe administrar. El mal uso de la insulina se traducirá en niveles anormales de glucosa en la sangre, hipoglucemia o hiperglucemia:
La hipoglucemia
(nivel bajo de glucosa en sangre) ocurre cuando un exceso de la insulina
administrada produce una captación excesiva de glucosa por las células del
cuerpo sumado a una baja liberación de glucosa por el hígado. Los síntomas incluyen sudoración, taquicardia,
somnolencia, temblores, confusión, falta de coordinación y náuseas. Si no
se trata, se produce un coma
hipoglucémico. Esta es una condición potencialmente
fatal que requiere asistencia médica rápida.
La hiperglucemia (altos niveles de glucemia) ocurre cuando muy poca insulina está presente. El exceso de glucosa se libera desde el hígado y las células no pueden absorber la glucosa adecuadamente. Los síntomas incluyen agitación, falta de concentración, fatiga, sed, calambres musculares, somnolencia y náuseas. A largo plazo, períodos regulares de la hiperglucemia aumenta el riesgo de complicaciones relacionadas con la diabetes como problemas renales, cardiovasculares, y en la vista.
Diabetes y Ejercicio
Factores como la contracción muscular, aumento del flujo sanguíneo y el aumento de la temperatura corporal hacen que el organismo sea más sensible a la insulina en los momentos posteriores al ejercicio. Además, cuando los músculos se contraen, pueden tomar la glucosa de la sangre, independientemente de la insulina. Por lo tanto, en las personas que no tienen diabetes, la liberación de insulina disminuye durante el ejercicio. Las personas con diabetes tipo 1 suelen necesitar ajustar su dosis de insulina en respuesta a las menores necesidades de insulina durante el ejercicio.
La hiperglucemia (altos niveles de glucemia) ocurre cuando muy poca insulina está presente. El exceso de glucosa se libera desde el hígado y las células no pueden absorber la glucosa adecuadamente. Los síntomas incluyen agitación, falta de concentración, fatiga, sed, calambres musculares, somnolencia y náuseas. A largo plazo, períodos regulares de la hiperglucemia aumenta el riesgo de complicaciones relacionadas con la diabetes como problemas renales, cardiovasculares, y en la vista.
Diabetes y Ejercicio
Factores como la contracción muscular, aumento del flujo sanguíneo y el aumento de la temperatura corporal hacen que el organismo sea más sensible a la insulina en los momentos posteriores al ejercicio. Además, cuando los músculos se contraen, pueden tomar la glucosa de la sangre, independientemente de la insulina. Por lo tanto, en las personas que no tienen diabetes, la liberación de insulina disminuye durante el ejercicio. Las personas con diabetes tipo 1 suelen necesitar ajustar su dosis de insulina en respuesta a las menores necesidades de insulina durante el ejercicio.
El tratamiento
de la diabetes varía para cada individuo. El control regular de las
concentraciones de glucosa en la sangre (glucemia) y el manejo a través de
pruebas de ensayo y error (bajo la supervisión de su especialista en diabetes) son
necesarias para ajustar los requerimientos de insulina y la alimentación
individuales para hacer ejercicio. Sin embargo, en general, los siguientes factores
deben ser considerados:
- La intensidad y
la duración del ejercicio
Previa al ejercicio en general, la dosis de insulina debe reducirse cuando el ejercicio se extiende más allá de 30 minutos. El nivel de reducción varía para cada individuo pero, en general, cuanto mayor sea el período de ejercicio, mayor será la reducción necesaria. Los ajustes de dosis de insulina deben hacerse con la guía de su especialista en diabetes, especialmente en las primeras etapas de manejo. - El grado de
control metabólico antes del ejercicio
Es más fácil manejar y predecir la respuesta del cuerpo al ejercicio, cuando el control metabólico es bueno. Es peligroso comenzar el ejercicio cuando los niveles de glucosa en la sangre son altos y hay presencia de cetonas en la orina. - Tipo y dosis de
insulina inyectada antes de hacer ejercicio
Es una práctica común el uso de una mezcla de insulina de corta y larga duración para controlar la diabetes. Es necesario predecir el período pico de actividad de la insulina para evitar niveles excesivos de insulina en la sangre cuando se realiza el ejercicio. - Sitio de
inyección de insulina
La absorción de insulina es mayor en los músculos en ejercicio. El abdomen suele ser el lugar preferido para la inyección de insulina antes del ejercicio. - Momento de la
comida previa al ejercicio
Los requerimientos de insulina se ven influidos por la cantidad y tipo de alimento consumido.
Requerimientos Alimentarios en Diabetes tipo
1
En general, las personas con diabetes tipo 1 tienen los mismos requerimientos dietéticos que la población general: una alimentación variada con abundantes frutas, verduras, legumbres, pan y cereales, cantidades moderadas de pescado, carne, pollo, huevos y productos lácteos y cantidades más pequeñas de alimentos con alto contenido en grasas, azúcar refinada y alcohol.
En general, las personas con diabetes tipo 1 tienen los mismos requerimientos dietéticos que la población general: una alimentación variada con abundantes frutas, verduras, legumbres, pan y cereales, cantidades moderadas de pescado, carne, pollo, huevos y productos lácteos y cantidades más pequeñas de alimentos con alto contenido en grasas, azúcar refinada y alcohol.
Las personas con diabetes (y la población en general) deben seguir una
alimentación saludable incluyendo alimentos con adecuada cantidad de
carbohidratos, bajos en grasas, con más fibra:
- Vegetales y frutas frescas
- Pan integral o multigrano
- Avena
- Cereales integrales
- Pasta
- Leche descremada
- Yogur de frutas descremado
- Legumbres
El control de glucemia suele ser mejor cuando se adopta un patrón de
alimentación constante en las comidas. A las personas con diabetes tipo 1 se
les ajusta el régimen de insulina de acuerdo con la ingesta de alimentos y
niveles de actividad en lugar de distorsionar la ingesta de alimentos para
satisfacer las dosis de insulina.
En la
próxima entrega revisaremos en profundidad las Estrategias de Nutrición Deportiva para deportistas con Diabetes Tipo 1
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