"EL CRICHI"
(“Crichi” junto a los jugadores, Daniel Ubaldo Godoy y Diego Ojeda)
Así cariñosa y respetuosamente, como todos lo conocíamos titulamos esta semblanza por su desaparición física.-
Era el dirigente nato y auténtico. Presencia inevitable en toda actividad del CLUB A. TALLERES conociendo al detalle los secretos del mismo. Fué un verdadero ejemplo en ese arte virtual de subsistencia de las instituciones, que bregan día a día palmo a palmo para sobrevivir a las problemáticas contingencias de las comunidades barriales.-
Se brindó con toda la plenitud de su existencia, sin ninguna mezquindad o beneficio personal. Presencia fundamental en citas deportivas y sociales, tomando la representación Tallerista, con el orgullo y la satisfacción de aquellos que llevan los colores azulgrana en lo más profundo de su corazón.-
Cosechó triunfos y alegrías, como situaciones amargas y dolorosas, pero sirvieron para la aparición de las tres cualidades que marcaron su existencia: BATALLADOR INCANSABLE-TESONERA CONSTANCIA-SACRIFICIO SIN MIRAMIENTOS- enmarcadas en la humildad, bajo perfil y una conducta intachable.-
Cuando deglosamos las hojas del tiempo, bajo ese repensar sin cronología y no ajustado a lo frío y calculado en los 86 años de vida institucional de la entidad emblemática del bosque bellvillense, tenemos la plena seguridad de que su presencia estará viva y su recuerdo rondará claro, fresco, nítido en cualquier rincón del Club.-
En la actualidad, una nueva generación que constituyen sus nietos, formada bajo el amparo de los principios del "ABUELO CRICHI", afrontan una etapa decisiva para el ulterior desenvolvimiento, contando con el apoyo incuestionable de un grupo de jóvenes dirigentes, que vislumbran y trabajan PARA UN TALLERES DIGNO, PROGRESISTA Y EN EXPANSIÓN.-
(“Crichi” junto a los jugadores, Daniel Ubaldo Godoy y Diego Ojeda)
Así cariñosa y respetuosamente, como todos lo conocíamos titulamos esta semblanza por su desaparición física.-
Era el dirigente nato y auténtico. Presencia inevitable en toda actividad del CLUB A. TALLERES conociendo al detalle los secretos del mismo. Fué un verdadero ejemplo en ese arte virtual de subsistencia de las instituciones, que bregan día a día palmo a palmo para sobrevivir a las problemáticas contingencias de las comunidades barriales.-
Se brindó con toda la plenitud de su existencia, sin ninguna mezquindad o beneficio personal. Presencia fundamental en citas deportivas y sociales, tomando la representación Tallerista, con el orgullo y la satisfacción de aquellos que llevan los colores azulgrana en lo más profundo de su corazón.-
Cosechó triunfos y alegrías, como situaciones amargas y dolorosas, pero sirvieron para la aparición de las tres cualidades que marcaron su existencia: BATALLADOR INCANSABLE-TESONERA CONSTANCIA-SACRIFICIO SIN MIRAMIENTOS- enmarcadas en la humildad, bajo perfil y una conducta intachable.-
Cuando deglosamos las hojas del tiempo, bajo ese repensar sin cronología y no ajustado a lo frío y calculado en los 86 años de vida institucional de la entidad emblemática del bosque bellvillense, tenemos la plena seguridad de que su presencia estará viva y su recuerdo rondará claro, fresco, nítido en cualquier rincón del Club.-
En la actualidad, una nueva generación que constituyen sus nietos, formada bajo el amparo de los principios del "ABUELO CRICHI", afrontan una etapa decisiva para el ulterior desenvolvimiento, contando con el apoyo incuestionable de un grupo de jóvenes dirigentes, que vislumbran y trabajan PARA UN TALLERES DIGNO, PROGRESISTA Y EN EXPANSIÓN.-
JUAN CARLOS LICARI
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